La rana que quiere tener la corpulencia del buey

Al Buey contempló la Rana, 
Y su talla le gustó. 
Ella, que no era más gruesa 
Que un huevo, a todo rigor, 
Se extiende envidiosa, se infla,
Y trabaja con tesón 
Por igualar en tamaño 
A la bestia que admiró. 
A su hermana dice:- "Mira, 
Es ya bastante? Ya estoy 
De su volumen?" , - "No, hermana". 
- "¿Al fin he llegado?", - "No". 
- "¿Ahora pues?" - "Estás lejos". 
La pécora, en conclusion, 
Se infló tanto y de tal modo, 
Que al último reventó

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